Viticultura en armonía

En su búsqueda de presentar lo mejor que nuestro país tiene para ofrecer, la productora María Noel Maisonnave se alió con Santander Select y Audi para recorrer las bodegas nacionales que están marcando el camino del progreso y la sustentabilidad.

El «Uruguay Encantador» es como María Noel Maisonnave define a la pasión que ha transformado su vida profesional, que comenzó ligada al marketing y al comercio exterior, entre otros rubros, pero hoy está dedicada, como escritora, a presentarle al mundo lo mejor que nuestro país tiene para ofrecer.

Luego de producir los libros Casas con encanto (2020), y Hoteles con encanto (2021), Maisonnave -que cuenta también con otras obras, como Uruguay Endurance (2012) y Casas de campo del Uruguay (2016)- ha puesto foco en la viticultura nacional, en auge en todas sus formas, tanto por la calidad de los vinos, como por la de la oferta de servicios relacionados al enoturismo.

Así surgió la idea de Bodegas con encanto, pero mientras que el libro recién comienza su producción, Maisonnave ya generó expectativa con dos videos de altísima calidad, producidos en asociación con Santander Select y Audi, que recorren el trabajo de Bodega Oceánica y Bodega Familia Deicas.

«Mi idea es darle siempre vida a los libros con material relacionado, y el camino que encontré es con los contenidos audiovisuales», señala Maisonnave en diálogo con The Select Experience. «Viendo historias y entrevistando dueños de bodegas, dando protagonismo a los distintos personajes que forman parte de cada lugar».

En las primeras dos entregas de este ciclo de videos, los entrevistados fueron Hans Vindin Diers, enólogo consultor de Bodega Oceánica, y Santiago Deicas, winemaker de Familia Deicas.

«El objetivo final es siempre el mismo: difundir el ‘Uruguay encantador’», afirma Maisonnave. «Dar a conocer un Uruguay distinto, que agrega valor y que sea atractivo para los visitantes y los potenciales inversores». 
«Ese sería el bien mayor. Difundir a Uruguay con sus diferentes bondades y atractivos», asegura.

Como preámbulo del libro, los videos de Bodegas con encanto nos acercan el presente de la viticultura uruguaya, pero también su futuro, uno enfocado en volver a la industria una más sustentable: «Me considero vanguardista porque trato de mostrar que siempre hay un lugar para el progreso, de mirar hacia adelante, para el futuro», explica Maisonnave. «Lo que trato de mostrar es que Uruguay va por el buen camino con innovaciones que tienen la cabeza en la sustentabilidad».

INTERPRETAR EL LUGAR

Santiago Deicas, winemaker de Familia Deicas, recuerda los comienzos de la bodega familiar, en un momento donde la realidad de la industria vinícola en nuestro país era muy diferente: «Cuando mi abuelo y mi padre comienzan esto no había vocación de hacer vinos de alta calidad [en Uruguay], porque se tomaba tanto vino que las bodegas vendían todo lo que producían», comenta. «Fue un cambio de paradigma apuntar a la calidad. Empezamos un camino de descubrimiento y de mucha innovación».

Preludio, cuya primera cosecha es de 1992, estuvo a la vanguardia y, en tan solo cinco años, comenzó a recibir reconocimientos internacionales, siendo parte clave de la transformación de los vinos uruguayos. «Antes Uruguay no exportaba vinos. Fue luego de Preludio que pudimos empezar a mostrar los vinos de Uruguay fuera de fronteras», afirma Santiago.

Como filosofía, Familia Deicas busca que sus vinos conserven las principales características de los lugares donde se cultiva la vid: «Trabajamos mucho con las anforas de barro, que ayudan a preservar los aromas primarios, los que vienen de cada lugar», señala Santiago. «Es algo único del mundo del vino: podés representar lo que puede dar ese lugar».

«Interpretar el lugar es la forma de hacer un gran vino. En el caso del suelo invertido en Vineyard, dimos vuelta el suelo dos metros. La zona fértil queda dos metros hacia abajo. Logramos así un resultado más sofisticado», detalla el winemaker. «En Cerro Guazubirá, en Lavalleja, junto a Chacras de la Sierras, plantamos directamente sobre la roca madre y lograrnos un resultado extraordinario, con aromas muy puros y muy frágiles».

Nuevamente a la vanguardia, Familia Deicas trabaja hacia un futuro sustentable, con un enfoque «más integral». «Somos la primera bodega en certificar viticultura sustentable», señala el winemaker.

VINOS EN ARMONÍA

Para Hans Vinding Diers, la cultura vinícola es su vida. Nacido en una bodega en Sudáfrica y criado en Burdeos, el enólogo consultor de Bodega Oceánica es un referente internacional que llegó al país de la mano de Natalia Welker, quien lo invitó a participar del proyecto que ella inició junto a Marcelo Conserva. Hoy Vinding Diers asesora en proyectos únicos, como Ultramar.

«Me llamaron y me dijeron: ‘Vamos a empezar un proyecto nuevo, poniendo un poco de nuestro vino en el agua, en una jaula a 50 metros de profundidad’», recuerda el enólogo. «Tiene sentido poner el vino en el agua como una bodega natural. Los resultados han sido sorprendentes», afirma.

Cada vino es diferente, explica, pero los clásicos tienen un elemento en común: la armonía. «Cada uno tendrá una percepción y realidad diferente, pero la armonía es el denominador común», asegura. «Luego es tema de gusto, pero, usualmente, un gran vino le hace cosquillas a tus emociones».

El progreso es esencial en el rubro, porque la pasión por el vino así lo demanda: «Te enamoras de esto y desde allí te vuelves un artista», explica Vinding Diers. «Es algo que nunca termina; nunca llegas al punto óptimo. Por eso lo sigues haciendo, siempre hay lugar para el progreso y las adaptaciones».

«En la viticultura, las innovaciones apuntan a la sustentabilidad», señala. «Intentamos volver a lo que era antes, hace muchos años, cuando las cosas se hacían de una manera más natural

MARÍA NOEL MAISSONAVE
IG: @marianoelmaisonnave